se me inundan las mejillas de humedad,
y es que hoy la humedad de la esquina
me trae tu humedad de paso rápido.
y húmedamente pienso que seria bueno
sobretodo en los dias húmedos perder
el sentimiento húmedo que invade el pecho.
y que si la humedad solo condensa
el rocío, que el rocío sea cristalino y puro,
paciente, pleno por la mañana y abstinente por las tardes.
y que si la humedad mata que
solo sea para la resurrección del vino.
ahora se me inundan los pies de humedad,
y necesariamente los hundo en el barro
de la inconciencia,
del fango que repite los húmedos y sombríos
recuerdos,
y húmedamente, siento que la niebla
como es húmeda te ha llevado en cada
kilometro de ruta que he transitado
y te ha dejado ahi solitario
sin nombre, sin piel en el húmedo pasto.
y desde alli, desde cada gramilla
escuché la voz húmeda de tu rechazo.
dicen que lo que mata es la humedad
pero en la belleza divina,
también dicen que mañana
el primer rayo de sol te disolverá
me disolverá,
húmedamente
sin prisa, durará unos segundos,
y no habrá regreso a la gota que fuiste
que fuimos.
y seré, serás alguien que
no es lo mismo, ni es lo nuevo,
ni es lo húmedo, lo feo o lo bello.
Seremos lo que no fuimos.

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